Vistas de página en total

martes, 21 de mayo de 2013

LA REFORMA DE LAS ENTRAÑAS DE LA ESCUELA...


El pasado viernes 17 de mayo, el Consejo de Ministros aprobó el Proyecto de Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) que propone la modificación parcial de la actual LOE, intentando dar un paso más allá y situar al Sistema Educativo español en la órbita del “neo-nacionalcatolicismo”, cuya finalidad es el establecer la segregación del alumnado por cuestiones de creencias y conciencia, de sexo, económicas y de clase social, geográficas, culturales, étnicas y de capacidad  funcional e intelectual.

Esta propuesta que hace el Partido Popular, sin tener en cuenta las recomendaciones del Consejo de Estado y enfrentándose a la inmensa de las fuerzas políticas y sociales de todo el Estado y a la comunidad educativa, por múltiples y variadas cuestiones.

Con esta reforma se nos está escapando de las manos nuestra escuela. La escuela debe formar parte de la construcción de la utopía de un mundo mejor que incluya a todas las personas, pero hemos construido una escuela discriminatoria, una para ricos y otra para pobres. Esto nos obliga a actuar contra la pobreza y la exclusión e implica conocer, comprender y movilizarse sin pérdidas de tiempo. La escuela debe educar en valores para llegar a producir solidaridad y compromiso.

El conocimiento y la cultura son las perfectas herramientas contra la ignorancia que vuelve a las sociedades presas fáciles de demagogos, totalitarismos e ideas incorrectas. Siempre hay una alternativa, fijémonos en el  proyecto que se está probando en Japón, un revolucionario plan piloto llamado "Cambio Valiente" (Futoji no henko), Los japoneses ya han despertado, se han dado cuenta de que la educación que impartían a sus niños, no era suficiente, sino deficiente, y han optado por mejorarla drásticamente. Está basado en los programas educativos: Erasmus, Grundtvig, Monnet, Ashoka y Comenius. Es un cambio conceptual que rompe todos los paradigmas. Es tan revolucionario que forma a los niños como "Ciudadanos del mundo", no como japoneses.

Este cambio en esas escuelas, no se rinde culto a la bandera, no se canta el himno, no se vanagloria a héroes inventados por la historia. Los alumnos ya no creen que su país es superior a otros por el solo hecho de haber nacido allí. Ya no irán a la guerra para defender los intereses económicos de los grupos de poder, disfrazados de "patriotismo". Entenderán y aceptarán diferentes culturas y sus horizontes serán globales, no nacionales. ¡Imagínese que ese cambio se está dando en uno de los países más tradicionalistas y machistas del mundo!

El programa de 12 años está basado en los conceptos: cero patriotismo, cero de materias de relleno, cero tareas y solo tiene cinco materias: aritmética de negocios, lectura (empiezan leyendo una hoja diaria del libro que cada niño escoja y terminan leyendo un libro por semana), civismo (Pero entendiendo  el civismo como el respeto total  a las leyes, el valor civil, la ética,  el respeto a las normas  de  convivencia, la tolerancia,  el  altruismo y el respeto  a la ecología), computación (Office, internet, redes sociales y negocios on-line), y por último, idiomas, alfabetos, culturas y religiones (japonesa, americana, china y española, con visitas de intercambio a familias de cada país durante el verano).

Los resultados esperados de esta intervención: jóvenes que a los 18 años: hablan 4 idiomas, conocen 4 culturas, 4 alfabetos y 4 religiones, son expertos en ordenadores, leen 52 libros cada año y manejan la aritmética de negocios al dedillo.

Indiscutiblemente no es perfecto y dependerá de cada país, y no necesariamente hay que estar de acuerdo con él, pero sí podemos comprobar que existen alternativas que hacen posible un cambio profundo para que nuestros hijos y nietos se puedan enfrentar a un mundo en  continuo cambio. Muchos maestros, profesores y pedagogos podrán no estar de acuerdo con este proyecto, pero de lo que no cabe duda es que quienes no se esfuercen en cambiar, les llevará a un camino sin salida. Por eso tenemos que llegar a un debate de la escuela que no se ha llevado en este país; sólo se utiliza la fuerza de la imposición sin ninguna postura de dialogo, le pese a quien le pese.

lunes, 20 de mayo de 2013

EL MUNDO EN 2030…


Artículo publicado en “Le monde diplomatique”, merece la pena leerlo y nos indica la ruta hacia dónde vamos. Creo que es interesante.
“Cada cuatro años, con el inicio del nuevo mandato presidencial en Estados Unidos, el National Intelligence Council (NIC), la oficina de análisis y de anticipación geopolítica y económica de la Central Intelligence Agency (CIA), publica un informe que se convierte automáticamente en una referencia para todas las cancillerías del mundo. Aunque obviamente se trata de una visión muy parcial (la de Washington), elaborada por una agencia, la CIA, cuya principal misión es defender los intereses de Estados Unidos, el informe estratégico del NIC presenta una indiscutible utilidad porque resulta de una puesta en común –revisada por todas las agencias de inteligencia de EE.UU.– de estudios elaborados por expertos independientes de varias universidades y de muchos otros países (Europa, China, la India, África, América Latina, mundo árabe-musulmán, etc.).

El documento confidencial que el presidente Barack Obama encontró sobre la mesa de su despacho en la Casa Blanca el pasado 21 de enero al tomar posesión de su segundo mandato, se acaba de publicar con el título: Global Trends 2030. Alternative Worlds(Tendencias mundiales 2030: nuevos mundos posibles) (1). ¿Qué nos dice?

La principal constatación es: el declive de Occidente. Por vez primera desde el siglo XV, los países occidentales están perdiendo poderío frente a la subida de las nuevas potencias emergentes (2). Empieza la fase final de un ciclo de cinco siglos de dominación occidental del mundo. Aunque Estados Unidos seguirá siendo una de las principales potencias planetarias, perderá su hegemonía económica en favor de China. Y ya no ejercerá su “hegemonía militar solitaria” como lo hizo desde el fin de la Guerra Fría (1989). Vamos hacia un mundo multipolar en el que nuevos actores (China, la India, Brasil, Rusia, Sudáfrica) tienen vocación de constituir sólidos polos continentales y de disputarle la supremacía internacional a Washington y a sus aliados históricos (Japón, Alemania, Reino Unido, Francia).

Para tener una idea de la importancia y de la rapidez del desclasamiento occidental que se avecina, baste con señalar estas cifras: la parte de los países occidentales en la economía mundial va a pasar del 56% hoy, a un 25% en 2030... O sea que, en menos de veinte años, Occidente perderá más de la mitad de su preponderancia económica... Una de las principales consecuencias de esto es que EE.UU. y sus aliados ya no tendrán probablemente los medios financieros para asumir el rol de gendarmes del mundo... De tal modo que este cambio estructural (añadido a la profunda crisis económico-financiera actual) podría lograr lo que ni la Unión Soviética ni Al Qaeda consiguieron: debilitar durante mucho tiempo a Occidente.

Según este informe, en Europa la crisis durará al menos un decenio, es decir hasta 2023... Y, siempre según este documento de la CIA, no es seguro que la Unión Europea
logre mantener su cohesión. Entretanto, se confirma la emergencia de China como segunda economía mundial y con vocación de convertirse en la primera. Al mismo tiempo, los demás países del grupo llamado BRICS (Brasil, Rusia, la India y Sudáfrica) se instalan en segunda línea compitiendo directamente con los antiguos imperios dominantes del grupo JAFRU (Japón, Alemania, Francia, Reino Unido).

En tercera línea aparecen ahora una serie de potencias intermediarias, con demografías en alza y fuertes tasas de crecimiento económico, llamadas a convertirse también en polos hegemónicos regionales y con tendencia a transformarse en grupo de influencia mundial, el CINETV (Colombia, Indonesia, Nigeria, Etiopía, Turquía, Vietnam).

Pero de aquí a 2030, en el Nuevo Sistema Internacional, algunas de las mayores colectividades del mundo ya no serán países sino comunidades congregadas y vinculadas entre sí por Internet y las redes sociales. Por ejemplo, ‘Facebooklandia’: más de mil millones de usuarios... O ‘Twitterlandia’, más de 800 millones... Cuya influencia, en el “juego de tronos” de la geopolítica mundial, podrá revelarse decisivo. Las estructuras de poder se difuminarán gracias al acceso universal a la Red y el uso de nuevas herramientas digitales.

A este respecto, el informe de la CIA anuncia la aparición de tensiones entre los ciudadanos y algunos gobiernos en unas dinámicas que varios sociólogos califican de ‘post-políticas’ o ‘post-democráticas’... Por un lado, la generalización del acceso a la Red y la universalización del uso de las nuevas tecnologías permitirán a la ciudadanía alcanzar altas cuotas de libertad y desafiar a sus representantes políticos (como durante las primaveras árabes o la crisis de los “indignados”). Pero, a la vez, según los autores del informe, estas mismas herramientas electrónicas proporcionarán a los gobiernos “una capacidad sin precedentes para vigilar a sus ciudadanos” (3).

“La tecnología –añaden los analistas de Global Trends 2030– continuará siendo el gran nivelador, y los futuros magnates de Internet, como podría ser el caso de los de Google y Facebook, poseen montañas enteras de bases de datos, y manejan en tiempo real mucha más información que cualquier Gobierno”. Por eso, la CIA recomienda a la Administración de EE.UU. que haga frente a esa amenaza eventual de las grandes corporaciones de Internet activando el Special Collection Service (4), un servicio de inteligencia ultrasecreto –administrado conjuntamente por la NSA (National Security Service) y el SCE (Service Cryptologic Elements) de las Fuerzas Armadas– especializado en la captación clandestina de informaciones de origen electromagnético. El peligro de que un grupo de empresas privadas controle toda esa masa de datos reside, principalmente, en que podría condicionar el comportamiento a gran escala de la población mundial e incluso de las entidades gubernamentales. También se teme que el terrorismo yihadista sea reemplazado por un ciberterrorismo aún más sobrecogedor.

La CIA toma tan en serio este nuevo tipo de amenazas que, finalmente, el declive de Estados Unidos no habrá sido provocado por una causa exterior sino por una crisis interior: la quiebra económica acaecida a partir de 2008. El informe insiste en que la geopolítica de hoy debe interesarse por nuevos fenómenos que no poseen forzosamente un carácter militar. Pues, aunque las amenazas militares no han desaparecido (véase les intimidaciones armadas contra Siria o la reciente actitud de Corea del Norte y su anuncio de un uso posible del arma nuclear), los peligros principales que corren hoy nuestras sociedades son de orden no-militar: cambio climático, conflictos económicos, crimen organizado, guerras electrónicas, agotamiento de los recursos naturales...

Sobre este último aspecto, el informe indica que uno de los recursos que más aceleradamente se está agotando es el agua dulce. En 2030, el 60% de la población mundial tendrá problemas de abastecimiento de agua, dando lugar a la aparición de “conflictos hídricos”... En cuanto al fin de los hidrocarburos en cambio, la CIA se muestra mucho más optimista que los ecologistas. Gracias a las nuevas técnicas de fracturación hidráulica, la explotación del petróleo y del gas de esquisto está alcanzando niveles excepcionales. Ya Estados Unidos es autosuficiente en gas, y en 2030 lo será en petróleo, lo cual abarata sus costos de producción manufacturera y exhorta a la relocalización de sus industrias. Pero si EE.UU. –principal importador actual de hidrocarburos– deja de importar petróleo, es de prever que los precios se derrumbarán. ¿Cuáles serán entonces las consecuencias para los actuales países exportadores?

En el mundo hacia el que vamos, el 60% de las personas vivirá, por primera vez en la historia de la humanidad,  en las ciudades. Y, como consecuencia de la reducción acelerada de la pobreza, las clases medias serán dominantes y se triplicarán, pasando de los 1.000 a los 3.000 millones de personas. Esto, que en sí es una revolución colosal, acarreará como secuela, entre otros efectos, un cambio general en los hábitos culinarios y, en particular, un aumento del consumo de carne a escala planetaria. Lo cual agravará la crisis medioambiental. Porque se multiplicará la cría de ganado, de cerdos y de aves ; y eso supone un derroche de agua (para producir piensos), de pastos, de fertilizantes y de energía. Con derivaciones negativas en términos de efectos  invernadero y calentamiento global...

El informe de la CIA anuncia también que, en 2030, los habitantes del planeta seremos 8.400 millones pero el aumento demográfico cesará en todos los continentes menos en África, con el consiguiente envejecimiento general de la población mundial. En cambio, el vínculo entre el ser humano y las tecnologías protésicas acelerará la puesta a punto de nuevas generaciones de robots y la aparición de “superhombres” capaces de proezas físicas e intelectuales inéditas.
El futuro es pocas veces predecible. No por ello hay que dejar de imaginarlo en términos de prospectiva. Preparándonos para actuar ante diversas circunstancias posibles, de las cuales una sola se producirá. Aunque ya advertimos que la CIA tiene su propio punto de vista subjetivo sobre la marcha del mundo, condicionado por el prisma de la defensa de los intereses estadounidenses, su informe tetranual no deja de constituir una herramienta extremadamente útil. Su lectura nos ayuda a tomar conciencia de las rápidas evoluciones en curso y a reflexionar sobre la posibilidad de cada uno de nosotros a intervenir y a fijar el rumbo. Para construir un futuro más justo”.
(1) http://www.dni.gov/index.php/about/organization/national-intelligence-council-global-trends. Existe edición en francés: Le Monde en 2030 vu par la CIA, Editions des Equateurs, Paris, 2013.
(2) Léase el Atlas, Nuevas potencias emergentes, editado por Le Monde diplomatique en español, Valencia, 2012.
(3) En esa misma línea de alerta, léase Julian Assange (con Jacob Appelbaum, Aandy Mûller-Maghun y Jérémie Zimmermann), Cypherpunks. La libertad y el futuro de internet, Deusto, Bilbao, 2013.
(4) http://en.wikipedia.org/wiki/Central_Security_Service ; consúltese también:http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2012/04/19/el-f6-el-servicio-de-espionaje-supersecreto-a-escala-mundial-96404/

domingo, 19 de mayo de 2013

CUATRO PALABRAS...


Hace unos días escuché en una conferencia de un compañero de profesión estas cuatro palabras que me enternecieron: compasión, cercanía, reconocimiento y cordialidad. Y me pregunto, ¿cómo sería nuestro mundo si esto funcionara?
Me quedo con las frases de estos tres pensadores del Siglo XXI: “El futuro es una vuelta al feudalismo”(Pedro Mateu-Gelabert),”La libertad como la conocemos hoy, sin límites, no va a existir en 30 ó 50 años”(George Gray Molina) y “Para sobrevivir, hemos de sustituir la competición por la colaboración”(Carlos A. Roldan).
Algo nos están diciendo, ¿hacia dónde va nuestro futuro? ¿Hacia dónde va el progreso? Imaginémoslo, como será la naturaleza, las casas, el transporte, las relaciones, las fronteras, la educación, la investigación, el desarrollo económico, la sostenibilidad ambiental, la pobreza, los niños, como serán las comunidades, la ecología, la solidaridad, internet, la pareja, la convivencia, la cultura, la comida, la religión, los jóvenes, las drogas, el amor, la ropa, el deporte, los hombres, las mujeres, la música, los viajes, el trabajo, el clima, el arte, los coches, el ocio, la ciencia, la política, las fiestas, los idiomas, la libertad, la economía, la tecnología, la energía, los juegos, la comunicación, los aviones, las enfermedades, la filosofía, la medicina, la vejez, los problemas, el odio, el agua, las ciudades, el matrimonio, la felicidad, las películas, la publicidad, Dios, el sexo, las bebidas, el transporte, etc.
Nos estamos acercando hacia una dictadura universal al servicio de una oligarquía del mercado bancario, y si no la paramos, nos atrapará, aunque ahora parezca que va lentamente, está minando toda la democracia; por lo que nos obliga a ser solidarios y colaborar para que este tremendo acontecimiento no nos ahogue. A ser revolucionario antes que nos aplasten con los instrumentos del poder. La crisis moral ha creado la crisis económica.
Me gustaría usar cuatro palabras para que nos abra una ruta nueva, que al mismo tiempo  de ser innovadora es desafiante con nuestro mundo; esas palabras son: COMPASIÓN, PACIENCIA, RECONOCIMIENTO Y CORDIALIDAD, y que nos llevará a un humanismo solidario.
Compasión, que literalmente significa "sufrir juntos", "tratar con emociones ...", es un sentimiento humano que se manifiesta a partir del sufrimiento de otro ser. Es la emoción de la compasión. Se acerca al pensamiento que decía Confucio: “la preocupación respecto a alguien sintiéndose solidario”.
Paciencia, es la actitud que lleva al ser humano a poder soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien. No hay que tener prisa, pero ser constante en la lucha.
Reconocimiento, ”la acción de distinguir a una cosa, una persona o una institución entre las demás como consecuencia de sus características y rasgos”. Que importante sería en relación a las diferentes culturas, a nuestras relaciones con los emigrantes, etc.
Y, por último, la cordialidad, ser franco y sincero, amable sin tapujos, afectuoso.
Ya no sé si estamos todavía a tiempo de parar esta situación, pero de lo que si estoy convencido es que si no nos ponemos a trabajar por cambiar de rumbo, destruiremos nuestra sociedad, nuestro mundo y no sobreviviremos. Siempre hay alternativas, a pesar de que nos las quieren negar. Si todos nos juntamos, la música cambiará. Renaceremos a un mundo más solidario y que nos inundará de una savia fresca. 

jueves, 2 de mayo de 2013

HOY INTENTO PONER UNA GOTA DE TERNURA A LA VIDA…


Con ocasión del día Internacional de la Felicidad (20 de marzo de 2013), el Secretario General Ban Ki-moon, nos transmitía el siguiente mensaje: «En este primer Día Internacional de la Felicidad, fortalezcamos nuestro compromiso con el desarrollo humano inclusivo y sostenible y reafirmemos nuestra promesa de ayudar a los demás. Obrar por el bien común también nos enriquece. La compasión fomenta la felicidad y nos ayudará a construir el futuro que queremos».

La búsqueda de la felicidad constituye el elemento esencial del quehacer humano. En todo el mundo, las personas aspiran a vivir una vida feliz y plena, libre de temores y necesidades y en armonía con la naturaleza. Sin embargo, el bienestar material básico sigue siendo difícil de alcanzar para demasiadas personas que viven en la pobreza extrema. Muchas más están expuestas a la amenaza constante que suponen las crisis socioeconómicas recurrentes, la violencia y la delincuencia, la degradación del medio ambiente y los peligros cada vez mayores que plantea el cambio climático.

Decía Gandhi  ‎”la felicidad se alcanza cuando, lo que uno piensa, lo que uno dice y lo que uno hace están en armonía". De esto hablaba esta mañana en la terraza de una cafetería con una buena amiga, concluíamos que sólo la coherencia es el camino que tenemos que andar,  porque es lo único que te da tranquilidad de conciencia y se ajusta a una moral construida con esfuerzo.

 La vida moderna, con sus prisas y su concentración en producir bienes materiales, bienes que nos ahogan y nos destrozan, ha alejado del sentir del corazón, de la humanidad que entraña el alma. Un corazón abierto siempre es tierno, no importa a quien pertenezca o las diferentes cualidades psicológicas que pueda tener una persona porque, cuando se abre el corazón, la ternura se cuela en una mirada, en un gesto, en un silencio. El corazón humano es básicamente bueno, pero ¿qué está ocurriendo para que se envenene las relaciones humanas?
Tenemos que revisar nuestra forma de vivir. Cuando la ternura se aparta aparece la aspereza y la pobreza se manifiesta de una manera brutal. Somos ásperos en nuestras relaciones, en la forma de tratarnos unos a otros. Pobre no es el que tiene poco, sino que el verdadero pobre es el que necesita infinitamente mucho.

Parece que cambiamos la piel por una lija y nos herimos cada vez que nos tocamos. Y entonces sufrimos, porque maltratamos a aquellos que queremos… Soy de los que piensa que no hay paz en el mundo porque no hay paz en el alma. Y es allí en donde puede florecer la ternura.
Cuando el amor proviene del alma no impone condiciones, es una corriente de vida que enriquece todo lo que toca, no aprisiona sino que es una ligera brisa que envuelve la vida.

Miremos más de cerca nuestras relaciones cotidianas si queremos conocernos a nosotros mismos. Y si encontramos asperezas, trabajemos arduamente para cambiarlas. Cada relación áspera está señalando un área interna a trabajar. La transformación mundial depende de la transformación de cada uno de nosotros. ¿Me podrías dar un poquito de ternura, por favor?

Si nos observáramos, si nos miráramos, podríamos leer esa petición en nuestro entorno más cercano…  Se trata de comunicarnos desde lo que somos, desde la fuente misma de vida y de la conciencia, y desde ahí, establecer las relaciones. Cuando nos relacionamos desde lo que somos, la vida adquiere un mayor grado de verdad y esto le da un sentido más profundo a la vida.

Uno de los males de nuestros días es ese sinsentido cotidiano que nos agobia. La nueva civilización tendrá una cultura, la cultura del alma. No es la globalización que tan descaradamente nos envuelve, sino lo que da sentido es la generosidad, la solidaridad, el trabajar juntos por encima de los intereses egoístas, en dar sin esperar nada a cambio.

Decía John Barrymore que "la felicidad frecuentemente se cuela por una puerta que no sabías que estaba abierta", por lo que no la cierres no vaya a ser que la tristeza nos ahogue.